La entrada de este mes va
dedicada a la autoedición, es decir, la edición de libros pagados
por el propio autor/a.
Pero, ¿por qué un autor/a
elegiría pagar de su bolsillo la edición de su novela?
Muchos
autor@s, después de meses o años trabajando en escribir un libro,
se encuentran con el difícil camino de lograr que una editorial se
interese en querer publicar su novela. Y no me refiero a querer
apostar a lo grande con una editorial de renombre, al contrario, el
autor/a novel se sentiría satisfecho si una editorial pequeña
mostrara un mínimo de interés o, incluso, que respondiera a la
propuesta editorial que le envía. Porque, en muchos casos el autor/a
es respondido con un silencio absoluto, un educado no,
gracias
o simplemente: no
tenemos tiempo de leer manuscritos.
Así que, después de agotar
todas las vías, el autor/a empieza a plantearse la autoedición, un
camino peligroso donde muchas “editoriales” de autoedición están
a la espera de poder aprovecharse de la ilusión de los autor@s
noveles.
En este tema yo clasificaría
estas “editoriales” en dos grupos, las francas y las piratas.
Las “editoriales francas”,
serían para mí aquellas que te hablan claro sobre los servicios que
te prestan sin venderte humo, es decir, te diseñan la tapa, te
imprimen el libro y te lo mandan a casa (con algún que otro servicio
más). A partir de aquí, es el autor/a quien debe moverse en buscar
librerías que quieran vender su libro y promocionarlo con los medios
que disponga (normalmente, redes sociales). Todo ello con un coste
que ya cada uno puede considerarlo aceptable o no.
Y luego están las que yo llamo
“editoriales pirata”, que son las que te prometen una
distribución profesional por toda España, publicidad, presencia
tanto en pequeñas como en grandes librerías y centros comerciales,
y todo ello sin moverte de casa. ¿Qué piden a cambio? Poca cosa,
vender un mínimo de ejemplares en la presentación del libro que
suelen ser unos cien libros. Si el autor/a logra venderlos a
triunfado y si no lo logra a pagar la tirada que no es barata.
Algunos pensarán... ¡pues 100
libros no son tantos! Puedes llegar a valorar que con familiares,
amigos, vecinos y algún conocido, compraran el libro y llegarán sin
problemas. Es decir, que seguro que vende los 100 ejemplares en un día.
Ja, ja y ja.
Es, en estas situaciones, donde
uno se da cuenta de quiénes son sus verdaderos amigos, puesto que
aunque conozcan el trato que has llegado con la editorial estoy
convencida que alguno pretenderá que se lo regales incluso.
Pero ahí no acaba la cosa, ¿qué
ocurre si el autor/a logra vender los libros en la presentación? ¿Ya
está todo hecho? En principio, él o ella ha cumplido con su parte
del trato, ahora le toca a la “editorial”, ¿no?
Por comentarios leídos en
Internet no es el caso y el autor/a se queda atrapado en un contrato
por 1 o 2 años con una editorial que apenas hace nada por mover su
libro o darlo a conocer.
Consejo, antes de escoger una
editorial de autoedición buscar en Google: opinión sobre la
editorial XXXX. Verá si realmente es de fiar o no, algunas han sido
denunciadas incluso y han cambiado de nombre para continuar con su
“estafa”. Aprovechad las herramientas que hoy en día tenemos a mano y buscar por el tan querido Santo Google, o donde os de la real gana, pero informaros.
Resumiendo, el mundo de la
autoedición no es fácil, hay que moverse mucho para darse a
conocer, poder ver tu libro en el mayor número de librerías y tener
paciencia. Quizá alguna editorial de las de toda la vida, ya sea
grande o pequeña, acabe interesándose por tu novela finalmente (el
boca a boca, es importante).
Pese a todo, la autoedición se
ha convertido en el único camino para que muchos autor@s noveles
puedan ver su novela publicada. En mi caso, aunque hubiera preferido
no tener que pagar ni un euro (cosa obvia), puedo decir que la
editorial con la que he trabajado ha cumplido con todo lo pactado
(hasta el momento) y no he recibido ni más ni menos de lo que
prometieron. También he valorado mucho la rapidez con que responden
y solucionan las dudas que pueda tener (no voy a decir que
“editorial” es porque no quiero que penséis que tenga algún
trato con ellos para que hable bien de su trabajo. No obstante, sí
os diré el título de mi libro: La profecía del mundo Oyrun. ¡Os
animo a comprarlo!).
Y ya, finalizando, decir que
aquellos que están pensando en autopublicarse, mucho cuidado, no
cuesta nada buscar unas cuantas opiniones por Internet para saber
cómo es una editorial en concreto. Os dejo este enlace de
escritores.org donde también hablan sobre el asunto para que veáis
claros ejemplos de lo que podéis esperar (click aquí).
Y a los lectores de este mundo
les invito a apoyar a los autor@s noveles comprando sus novelas ya
sea en formato físico o digital.
¡Por favor! Nada de piratear,
que si no lo sabíais ahora ya lo sabéis, la autoedición cuesta un
buen pico y el precio de los libros digitales de autor@s noveles (no
entraré en el precio de los autor@s de renombre) son por lo general
bastante económicos. Dejar de pagar 2 o 3 euros no os hará ricos,
pero para el autor novel puede ser la diferencia entre conseguir un
buen puesto en el ranking de Amazon (por dar un ejemplo) y, quién
sabe, que alguna editorial se planteé leer el manuscrito,
simplemente leerlo.
¡Apoyad a los que empezamos!
Y hasta aquí la entrada de este
mes.
Espero que os haya resultado
útil e interesante.
¡Saludos!